jueves, 3 de marzo de 2016

Díalogos Íntimos por Concepción Sedano González


Pegada a mi ventana
veo pasar la tarde
y se me marcha
cascabel de otro día, la luna asoma ya
esperaré a mañana para decirte ALGO
                    …………………………..
                    Tengo la mar enfrente
                   …y un barco que se va.       
    
                     


---------------------------------------------------------
       
                                       
Atardecía cuando empezamos a mirarnos
y no noté la noche,
ni esa lágrima ausente que apareció en mis cosas,
ni ese sueño de celos,
ni ese dolor latente.


Sólo noto tu ausencia
cuando el tiempo trasnocha
 y el sol no viene.

Sólo espero tu sombra sobre mi frente.
         
-----------------------------------------------------

Te espero
y el declinar de la tarde rasga mis sentidos.
Te necesito.
Y porque sólo los dos percibamos la extraña sensación
que nos rodea,
que Dios y el silencio sean nuestros únicos testigos
…hasta el amanecer.

-------------------------------------------------------------


Me pesan las horas de la tarde
y sigo manteniendo mi antorcha encendida.
Sólo un rincón sabe guardarme mi secreto
y un gato de piedra que me mira…
el gato,                                                  
el mío,
EL NUESTRO…
quizá no entienda nada,
pero me mira
y a veces
...ME BASTA CON MIRARLE A LOS OJOS!



----------------------------------------------------




Atravesé sin ti mi paraíso
y encalló mi barca…
Como cualquier náufrago perdido
sostuve el remo
                 esperando un nuevo amanecer.
QUIZÁ NOS ENCONTREMOS ALGÚN DÍA
                      -leyendo el mismo libro
                      -escribiendo el mismo verso
                      -mirando el mismo mar
                     -bebiendo el mismo viento
 ...y despertando del mismo sueño
para soñar de nuevo cualquier tarde.



------------------------------------------------------






DÉJALO…
soportaré el sol cuando caiga la tarde
esparciré mil semillas de locura
divulgaré mis sueños como pétalos al viento enarbolados
dejaré que florezca una esperanza nueva
y algún espacio pequeño en estas manos.

Habitaré los aires para rozar tu escarcha
dibujaré en semicírculo tu vida
compraré en algún sitio una sonrisa
y me iré.
ME IRÉ
        con una máscara nueva hacia otro día.
                      


------------------------------------------------------------
   


Te he visto bajar por la ladera inmensa de mis mil silencios
y descolgué la alforja que dejé en mi puerta
y he abierto el baúl que guardaba en secreto
y
PORQUE ME MIRABAS, COMO ME MIRASTE
te confié mis sueños
y mi alma tembló de repente
y en mis manos que estaban vacías, me sobraba tiempo
…recordé que tenía un amor
QUE NO ERA DE NADIE
para darlo entero
y
PORQUE ME MIRABAS, COMO ME MIRASTE
confié en tus besos.




No hay comentarios:

Publicar un comentario

El septyimo cielo en los ojos n°60