ARTE Y ALIMENTOS

POR ROSI MORALES 

El alimento y el arte comparten un mismo fin: nutrir

…el primero nutre al cuerpo, el segundo nutre al espíritu

Sin cuerpo no hay espíritu y sin espíritu no hay cuerpo

La alimentación se ha visto representada continuamente en las artes a través de los siglos… Pero, antes que nada ha de entenderse que la relación que existe entre arte y alimento no es solamente de representación. Desde luego que a través del arte puede ilustrarse la historia de la gastronomía, pero el alimento visto en las artes va más allá de ser el “tema” de una obra, ya que en muchas ocasiones forma parte intrínseca del mensaje, significado, estilo, materia o soporte de una creación artística.

El arte y el alimento encuentran nexos de unión muy diversos con el paso del tiempo, algunos ejemplos de esta relación en las culturas de Occidente son
-    Los mosaicos romanos dispuestos debajo de la mesa, representando restos de comida, eran una forma de decir que lo que se caía al suelo era para el mundo de los muertos…
-    Las representaciones medievales de la Última Cena eran una forma de recordar la comunión de Cristo con sus apóstoles…
-    Los apuntes de cocina de Leonardo da Vinci van explicando los modales en la mesa de su época…
-    Las “Naturalezas muertas” del Barroco, representando flores y alimentos varios como frutas, transmitían el mensaje del paso del tiempo y los ciclos de la vida desde el nacimiento hasta la muerte…
-    La pintura de género, donde carniceros, polleros, vendedores de frutas y puestos de mercado toman un papel protagónico…
-    Platos preparados por artistas, poniendo en práctica la filosofía que regía sus propias obras y las de todo un movimiento artístico, como es el caso de la Cocina Futurista…
-    Hábitos de consumo de la cultura de masas, el marketing, el packaging y el fast food protagonizando obras de arte en la Posmodernidad…
Y finalmente, debe resaltarse en especial un movimiento artístico, surgido  en la segunda mitad del Siglo XX  que ha influido a gran cantidad de artistas contemporáneos y que le ha dado un giro a la relación entre arte y alimento: Eat Art.
El Eat Art, bautizado así por Daniel Spoerri uno de sus máximos exponentes, se dio como una nueva forma de expresión artística a partir del alimento. Por una parte, llevando a cabo happenings o acciones en torno a la comida y los hábitos alimenticios y, por otra, utilizando comida para producir obras de arte. Este último caso, abría la posibilidad de un par de opciones: la comida como parte del material de creación o soporte de la obra, utilizando por ejemplo restos de una cena para ser incluidos en una pieza… o bien, la comida siendo en sí misma una obra de arte: arte comestible.
Dos grandes artistas del Eat Art y precursores del arte comestible son Miralda y Dorothée Selz, quienes desde hace más de 40 años han desarrollado una larga trayectoria artística con creaciones que giran en torno a la comida, su ritual y significado. A finales de la década de los 60′s, como colectivo Miralda-Selz y llamándose a sí mismos “Traiteurs coloristes”, realizaron diversas obras de arte comestible a partir del tratamiento de la comida y el color, siendo una gran innovación para su época.